Un momento de mucha emoción se vivió este jueves en el debut de Diana, el nuevo programa de conversación de Diana Bolocco, que tuvo como primer invitado a Benjamín Vicuña.

En la ocasión, el actor recordó los difíciles días que vivió tras la muerte de hija mayor Blanquita, quien falleció en 2012 debido a una neumonía hemorrágica, que la mantuvo en coma inducido por más de una semana.

“La pérdida de mi hija no tiene explicación, no tiene nombre, no lo voy a entender nunca. Pero sí te puedo decir que atravesé momentos de mucha rabia, luego de resignación, y hoy después de cinco años, la pena se transforma en evocar lindos momentos, y cuando la recuerdo sonrío”, confesó el intérprete que aseguró que habla de ella todos los días “y está presente todo el tiempo, en el cotidiano, en mi trabajo, en todas partes”.

Sin embargo, no siempre fue así, pues también atravesó por momentos de rebeldía contra Dios. “Me rebelé contra la fe, y sentí mucha rabia, no entendía.. después aceptas los designios de Dios, pero sientes mucha rabia”, afirmó.

Según reveló fue su segundo hijo Bautista, quien lo ayudó a poner las cosas en perspectivas. “Con la lógica y la filosofía de la fe, él me explicó a mi que mi hija ya no estaba en ese ataúd, sino que estaba en el cielo”, dijo.

“Desdramatizando y con esa grandeza y sabiduría, yo entendí que tenía que volver a la fe, que no tenía otro camino, porque el camino de rebeldía para mí, para Benjamín, era demasiado oscuro, demasiado terrible y por lo mismo, decidí honrar la vida y abrazar esta vida maravillosa, cruel, maravillosa, rara, y seguir adelante por ella”, reconoció.

Finalmente, el actor también aseguró que esa pena que siente a diario ha logrado sobrellevarla gracias a sus hijos, y actualmente, gracias a su pareja Eugenia Suárez. “Hay que saber cargar con esta pena, y ella -Eugenia- la comparte, me ayuda, me complementa”, aseguró.