Para nadie pasó desapercibida la muerte de Carlos Muñoz, el productor de la serie “Narcos” que fue asesinado en México cuando buscaba locaciones para la historia de Netflix. El atentado fue un golpe duro para el equipo realizador y también para el elenco, tal como quedó demostrado durante esta jornada.

Fue el actor chileno Pedro Pascal quien tomó la palabra para referirse al hecho, que además sucitó la irrupción del hermano de Pablo Escobar, Roberto Escobar, quien le exige a Netflix un pago de mil millones de dólares por términos de uso de imagen de los cabecillas del Cartel de Medellín.

En diálogo con el portal de espectáculos TMZ, el intérprete fue enfático en aclarar que la serie no puede seguir adelante si no se refuerzan las medidas de seguridad para los integrantes de su equipo.

“No podemos hacerlo, si no es seguro. Estamos hablando de vidas”, resumió el chileno, en un mensaje tan escueto como determinante. Luego, puso paños fríos sobre el futuro de la trama: “Si quieren seguir (con las grabaciones de “Narcos”), se la arreglarán para buscar una forma segura de hacerlo”, agregó Pascal en el portal estadounidense.

Hasta el momento, Netflix no se ha pronunciado frente a la exigencia que hizo la semana pasada Roberto Escobar, quien aseguró a The Hollywood Reporter: “En este momento, estamos en conversaciones con ellos (Netflix) a través de nuestros abogados Browne George Ross LLP para obtener nuestro pago de mil millones de dólares. Si no lo recibimos, cerraremos su pequeño espectáculo”.