Los fanáticos de Game of Thrones deben tener un duro síndrome de abstinencia a estas alturas, y eso que la serie recién terminó el 27 de agosto, y aún no existe una fecha de estreno oficial de la próxima temporada.

Al menos, HBO alivia a sus seguidores compartiendo entretenidos y sorprendentes videos tras las cámaras, como uno de la brutal batalla entre Arya Stark y Brienne de Tarth.

Las imágenes forman parte del episodio “El Juego Revelado” (7×01) y muestra cómo las actrices Maisie Williams (1,55 metros) y Gwendoline Christie (1,91 metros) practican para una de las escenas más sorprendentes de la última temporada, pese a su gran diferencia de estatura.

Un punto importante a considerar es que George R.R, Martin creó a Arya siendo zurda, pero Maisie Williams no lo es, consignó el sitio de entretenimiento Bored Panda.

“Soy diestra, y cuando mamá estaba leyendo el primer libro me dijo que Arya era zurda”, relató. Y agregó “desde entonces quise intentar hacerlo todo con la mano izquierda. Estaba practicando en el jardín y lo intentaba con la izquierda para pillar el ritmo”, explicó.

Sin embargo, no todas las escenas muestran a la pequeña Arya como zurda. “A veces tengo que hacer cosas con la derecha por el ángulo de la cámara y demás. A algunos les molesta que no lo haga todo con la izquierda. Yo quería, de verdad. Pero a veces era muy complicado y no podíamos”, afirmó.

En la secuencia de acción se puede ver a ambas actrices preparando la coreografía para que la pelea se vea lo más real posible. Incluso en algunas partes se utilizaron dobles para que hicieran algunos trucos que le dieran mucho más dinamismo a las escenas.

“Generalmente mientras atacas también te defiendes, pero ellas tenían tamaños de pasos completamente diferentes, entonces fue un gran desafío realizar esa coreografía y lidiar con esos dos temas”, explicó Rowley Irlam, coordinador de dobles de GOT.

Agregó que usaron dobles para demostrar mejor sus habilidades y ponerlas a un mayor grado de peligro. Mientras que Gwendoline y Arya coincidieron en que fue un gran desafío pelear con su diferencia de tamaño y vivieron la escena como mucho más que una simple coreografía.