A principios de septiembre, el palacio de Buckingham anunció que Kate Middleton y el príncipe William esperaban a su tercer hijo. La noticia tomó por sorpresa al mundo, pero lamentablemente la celebración no duró mucho.

A las pocas horas se dio a conocer que la duquesa de Cambridge sufría de Hiperémesis gravídica, la presencia de náuseas y vómitos intensos y persistentes durante el embarazo, lo que hizo que incluso se perdiera el primer día de clases de su hijo mayor, George.

A poco más de un mes de eso, Kate reapareció en público en un evento realizado palacio de Buckingham para celebrar el Día Mundial de la Salud Mental.

En la jornada, donde también asistieron los príncipes William y Harry, Kate aprovechó de saludar a los presentes quienes destacaron lo delgada que se encuentra la duquesa.

En la ocasión, Middleton llegó luciendo un vestido celeste de encaje y manga larga de de Temperley London, el cual dejó entrever su aún diminuta “baby bump”.

¿Qué es la Hiperémesis gravídica?

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU. este problema se da durante los primeros tres meses de embarazo, donde los vómitos y nauseas se intensifican y se hacen cada vez más frecuentes.

Esto puede llevar a la deshidratación, pérdida de peso y desequilibrios electrolíticos, especialmente porque el paciente pierde el apetito.

” La afección puede suceder en cualquier embarazo, pero es ligeramente más probable en caso de estar esperando gemelos (o más bebés) o si tiene una mola hidatiforme. Las mujeres presentan un riesgo mayor de padecer hiperémesis si han tenido el problema en embarazos previos o si son propensas a los mareos por movimiento”, asegura la web.