La actriz Sophie Turner (21), que interpreta a Sansa Stark en Game of Thrones, acudió el miércoles en la noche a la premiere de la séptima temporada de la exitosa serie de la cadena HBO.
El evento se llevó a cabo en Los Angeles, Estados Unidos, donde la estrella sorprendió al llegar con un nuevo look: dejó atrás el cabello rubio que había lucido en los últimos meses y regresó al pelirrojo.
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El tono que exhibe actualmente es más cercano al castaño cobrizo que el que tenía antes de agosto de 2016, cuando lo mantenía de color rojo fuerte porque así debía tenerlo su personaje en el show.
Debido a que en ese entonces se lo tiñó rubio y lo cortó, en la séptima temporada la actriz utiliza una peluca para poder lucir una melena larga y roja como la que solía tener.
Respecto a su atuendo, Turner vistió un original vestido corto brillante, el cual tenía el peculiar diseño de un rostro que abarcaba la mayor parte del traje.
A la ocasión también acudieron otros actores de la serie, entre ellos Kit Harington y Rose Leslie, Maisie Williams, Nikolaj Coster-Waldau, Aiden Gillen, Jerome Flynn, Iain Glen y más.
La séptima temporada será la penúltima del show y estará compuesta por 7 episodios.
Esto significa que tendrá 3 menos de lo normal. No obstante, serán más largos que en temporadas anteriores, siendo el penúltimo y último los más extensos, con una duración de 71 y 81 minutos respectivamente.
