A través de una columna en el periódico The Wall Street Journal, Pamela Anderson disparó duros dardos en contra de la industria de la pornografía.
“Take the Pledge: No More Indulging Porn” (“Unanse a la promesa: no más porno complaciente”, en español), es el título del texto en el que la ex conejita Playboy asegura que el porno tiene “efectos corrosivos en el alma del hombre y en su habilidad de funcionar como marido y, por extensión, como padre”.
Anderson, quien escribió el artículo en conjunto con el rabino Shmuley Boteach, citó como ejemplo el escándalo protagonizado por el político norteamericano Anthony Weiner, quien fue sorprendido enviando fotografías de su entrepierna a una amante.
El propio Weiner renunció en 2011 renunció a su cargo como congresista tras descubrirse que había mandado fotos íntimas a una universitaria de 21 años de Washington.
De acuerdo a la canadiense, este tipo de prácticas corresponde a un “peligro adicional de la pornografía”.
“En palabras sencillas, debemos educarnos y educar a nuestros niños para entender que el porno es para perdedores; una salida aburrida, ineficiente y que no lleva a ningún lado, para gente demasiado vaga como para cosechar las grandes recompensas de una sexualidad sana”, aseveró la recordada protagonista de Baywatch.
A juicio de Anderson, la adicción a la pornografía “empeorará con el tiempo”, y además trae como consecuencia que los hombres tengan una vida sexual menos satisfactorias con sus parejas.
“Esto es un peligro público de gravedad sin precedentes, considerando la gran disponibilidad de la pornografía, y lo fácil que es acceder a ella anónimamente y diseminarla”, sostuvo.
