Diputados de la Democracia Cristiana solicitaron a la Contraloría General de la República pronunciarse respecto al reajuste de las tablas de mortalidad de un 2%, vigente desde julio de 2016.

Este cambio, nacido a partir de las mediciones de la Superintendencia de Pensiones y la de Valores y Seguros, implica que los ahorros deberán ser repartidos en una mayor cantidad de años, lo que implica una baja en las pensiones.

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El jefe de bancada de la DC, el diputado Fuad Chahín, señaló que “la normativa no se ajusta a criterios técnicos objetivos”. El parlamentario enfatizó que presentaron una solicitud de invalidación del proceso cuando éste entró en vigencia, pero que “no han tenido respuesta” por parte de ninguno de las dos entidades reguladoras. Ante ello, Chahín señaló que esperan que “puedan declararse ilegales ambas resoluciones”. 

La modificación de las tablas de mortalidad se realiza cada cinco años y reflejan el incremento de las expectativas de vida al cálculo de las pensiones.