Tras el bullado caso de Rafael Garay, quien hoy es buscado por la Interpol en Europa acusado de un millonario fraude a sus inversionistas, vuelve a ponerse en debate el esquema de las estafas piramidales, las que este año también conocimos en casos como el de AC Inversions o American Traders.

¿Cómo podemos identificar a estas empresas que ofrecen increíbles resultados a costa de nuestro dinero?

El decano de la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), Andrés Ulloa Oliva, estuvo en el matinal Nuestra Casa de Canal 9 BíoBíoTV para conversar sobre el tema.

Según explica el profesional, una estafa piramidal, ya sea por venta de productos u ofrecimiento de rentabilidad sobre inversiones, funciona sobre el mismo modelo: personas que invitan a otras a formar parte, a cambio de una comisión.

Aquellas comisiones sirven para financiar a los niveles superiores de la pirámide, es decir, quienes ingresaron primero. Sin embargo, forzosamente la estructura llegará a nivel en que la gran mayoría de integrantes que entraron en la última etapa no podrán recuperar su dinero, derrumbándose el sistema.

“¿Hasta qué tamaño puede crecer la pirámide? ¿En qué momento se derrumba? Ese es el momento en que no se puede pagar hacia atrás, ya que mientras el negocio siga creciendo, el problema no se ve”, indicó el Ingeniero Comercial.

Aunque por ello resulta difícil detectar estos fraudes, Ulloa señaló 3 puntos a los que se debe poner atención cuando alguien le invite a integrar negocios bajo esquemas similares.

1) Si le ofrecen una rentabilidad superior al 1.5% ó 2% mensual ya es sospechoso, dado que las mayores instituciones financieras del mundo no pueden hacerlo. Si le prometen una rentabilidad del 10% ó 12%, como ocurría con estas empresas, de plano se trata de un fraude.

Es verdad, hay inversiones que han entregado hasta un 200% de rentabilidad, pero aquello es imposible de prever y ninguna firma puede garantizarlo.

2) Averigüe las normativas o regulaciones a las que está sometida la empresa. Por lo general, estas firmas operan sobre la ilegalidad, sin respaldo del Estado o bajo un marco legal muy frágil.

3) Sobre todo, considere que no existen los negocios que provean dinero fácil. El dinero fácil no existe en ninguna parte del mundo.

El Decano señaló que en caso de tener sospechas de estar frente a una estafa, se debe poner los antecedentes en conocimiento de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) o de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).

Revisa aquí la entrevista a Andrés Ulloa en el matinal Nuestra Casa: