La “guerra de los destilados” no da tregua. La empresa productora del Secreto Peruano Sour respondió seriamente a la sanción publicitaria que recibió tras la denuncia que interpuso la pisquera chilena CCU.

A través de un inserto en medios de comunicación, la marca del “sour” reconoce que fue sancionada por el Consejo de Ética Publicitaria, Conar, sin embargo, busca aclarar que dicho fallo le solicita dejar de usar la frase “el verdadero sour peruano” y destacar en su etiqueta que su ingrediente base es destilado de cereal, y que no fue castigada “por no usar pisco en la receta”.

CCU había interpuesto un reclamo, acusando publicidad engañosa por lo antes descrito. Para la embotelladora del grupo Luksic resultaba engañoso que la marca se pudiera asociar al pisco (o destilado de uva) cuando no era su ingrediente base.

“El fallo de Conar acepta a su vez el derecho que tiene Secreto Peruano Sour a comunicar en su publicidad su origen peruano gracias a que su receta fue creada por un chef peruano”, explica la empresa sancionada.

Enfatizan que “el destilado de cereal importado “tiene los más altos estándares de calidad y extrema pureza gracias a sus 5 destilaciones”, base que es usada con regularidad en coctelería todo el mundo.

Pero Secreto Peruano Sour fue más allá y contestó con una “carta bajo la manga”. Ellos aseguran que han sido los responsables de estimular la competencia en el rubro de los cócteles en nuestro país, revelando incluso que Capel, pese a ser chilena, ya se sumó a “la moda” lanzando el producto “Inca de Oro Sour” y que la propia CCU, a través de su filial Compañía Pisquera de Chile “acaba de comenzar la fabricación y comercialización de Cusqueño Sour”.

Y Secreto Peruano lanzó el dardo: “el producto Cuzqueño Sour declara utilizar como alcohol base principal ‘destilado de alcohol de cereal’, la misma base utilizada por Secreto Peruano Sour y que fuera el argumento central de la demanda (de CCU) realizada en Conar”.

¿Cómo seguirá esta lucha de marcas?