La agresión física que enfrentó al presidente de la Confederación de Trabajadores del Petróleo y al gerente de Gas y Energía de Enap durante una reunión con el sindicato de la planta Bío Bío, tensó las relaciones entre la estatal y sus empleados, que se declararon en alerta en Hualpén ante cualquier intento privatizador.

El incidente acaecido el 25 de octubre marcó un antes y un después en las relaciones históricamente fluidas de los trabajadores de la estatal con la plana directiva y gerencial.

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Uno de los protagonistas de la disputa, el presidente de la Confederación de Trabajadores del Petróleo y Secretario General de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Nolberto Díaz, encabezará este lunes una asamblea de trabajadores en Concepción para analizar los pasos a seguir.

Iván Montes, presidente del sindicato ENAP Petrox, señala que no hay que perder la perspectiva de que todo se originó por el intento de conocer detalles sobre la operación de traspaso de la planta de hidrógeno a la firma privada Linde para que la mantenga y opere, algo a lo que se oponen los trabajadores.

Radio Bío Bío consultó a Enap sobre los motivos y los alcances de esta operación, lo cual la estatal respondió que se trata de una oportunidad que cuenta con racionalidad tanto técnica como económica, y que consiste en traspasar a Linde el 10% que mantiene ENAP en esa instalación.

Las ventajas de esta operación, dice la empresa, consisten en asegurar a cambio un suministro de hidrógeno y vapor en el largo plazo para la refinería, con una importante reducción del costo actual de la tarifa mensual.

Relación en entredicho

Respecto de lo acontecido en la reunión con la directiva de los sindicatos Fenatrapech y ENAP-Petrox, la estatal lamentó la conducta -a su juicio-injustificada de uno de sus dirigentes.

Ello, según ENAP, pone en entredicho la relación que ha existido siempre entre los sindicatos y los ejecutivos y que se caracteriza por el respeto, el diálogo y una mirada de largo plazo en beneficio de la empresa y del país.

El hecho es investigado por la Gerencia de Ética y Cumplimiento, y Enap dice que lo que corresponde es esperar el término de dicha investigación.

La posición de la Administración y de todo el cuerpo ejecutivo ha sido clara y de conocimiento de todos los trabajadores, indicaron refiriéndose a una carta enviada por el gerente general Marcelo Tokman.

Por su parte, los empleados también confían lo que esta instancia dictamine.

La directiva sindical cree que se está claramente frente a un proceso de privatización de una parte de Refinería Bío Bío, que si bien según la gerencia alcanzaría sólo al 10% de la operación de la misma, para los trabajadores esto significa abrir la puerta a otras privatizaciones.

Mientras, Enap señala que existe una importante cartera de proyectos en desarrollo de aquí al 2022, con inversiones de cerca de US$ 1.000 millones, por lo que -muy por el contrario de lo que se alega- están en un proceso de fortalecimiento y crecimiento de las actividades propias de su negocio.