El 6 de Julio del 2013 fue un día que la tenista francesa Marion Bartoli nunca olvidará. Luego de semanas intensas, consiguió el título de Wimbledon venciendo claramente a la alemana Sabine Lisicki por 6-1 y 6-4 .

Sin embargo, un mes después llegaría una noticia que impactó al mundo del tenis. Luego de perder en el Masters de Cincinatti, la francesa, que ese entonces tenia 28 años, anunciaba su retiro entre lágrimas: “No puedo jugar más de 45 minutos porque mi cuerpo ya no responde. Me siento adolorida y agotada”, expresó.

El retiro de la tenista vino de la mano con una dramática perdida de peso: ganó Wimbledon con 73 kilos, llego a pesar 80 para luego caer a la preocupante cifra de 42 kilos.

En todo momento la francesa explicó su situación en relación a un grave virus que la afectaba, lo que la llevó incluso a ser rechazada para una exhibición en el torneo londinense a causa de lo frágil que se encontraba.

Hace unas semanas, desde que anunció su vuelta al circuito profesional en Marzo para disputar el Master Series de Miami, Bartoli reveló en una entrevista con el medio francés Le Equipe, los verdaderos motivos de su drástico cambio de peso.

El responsable es nada menos que un ex novio de la jugadora, quien constantemente la criticaba por su peso: “Me dejé destruir por alguien y no pensé que fuera posible”, detalló.

Sobre los momentos que tuvo que vivir, la ex número 7 del mundo relató que “cuando me retiré era la mujer más feliz del mundo. Entonces conocí al que hoy es mi ex novio, en mayo de 2014, y cada día él me decía que estaba gorda. Veía a una mujer delgada por la calle y me decía: ‘¿Has visto que delgada y preciosa es?“.

De esta forma queda esperar la semana del 19 al 26 de marzo para volver a ver en cancha a la gala, quien además de recuperarse del peso que la tuvo al borde del precipicio, también volvió a las risas y las ganas de vivir. Sus ambiciones ahora no se detienn y ya aspira a volver a competir en Roland Garros, Wimbledon y la Copa Federaciones.

“Quiero probarme a mí misma que estoy viva. Tuvo miedo de morir pero ahora me siento bien al despertarme cada mañana, tener salud y energía para hacer las cosas que quiero durante todo el día. He pasado todos los exámenes médicos para regresar”.