Una polémica de proporciones es la vive hoy el canotaje chileno luego que la deportista nacional, Maria José Mailliard, denunciara discriminación por parte de un miembro de la Federación hacia su entrenador cubano Rolando Rill.

En medio de un nacional selectivo para el Panamericano especifico de Ecuador y los Juegos Bolivarianos realizado ayer en Curauma, Mailliard aseguró que el director de velocidad, Carlos Muslow, tuvo “un arranque de locura y sin que Rolando hiciera absolutamente nada fuera de lo normal, de forma muy despectiva le dice que se vaya a su país”, relató en su cuenta de Facebook.

Consultada por BioBioChile, la deportista de 26 años entregó más detalles de este hecho y afirmó que la Federación llamó a Carabineros para que acudiera al lugar a raíz de la presencia de Rill, y que Muslow le dijo: “Este negro que se vaya a su país, no lo queremos aquí”.

Desde la Federación Chilena de Canotaje desmintieron que lo dicho por Muslow fuera discriminatorio, sino que el dirigente cumplió con su obligación de decirle que no podía participar en el selectivo por encontrarse suspendido por agredir al presidente de la entidad (hecho ocurrido en 2009).

“No hay ninguna discriminación hacia los cubanos, ya que en la Federación tenemos dos entrenadores contratados de ese país (el head coach Evidio González y el encargado de la categoría juvenil Pablo Yera). El tema es con él (Rill), es una persona agresiva, fue condenado por la justicia por agredirme. Es un hombre tremandamente agresivo y es un problema para nosotros”, declaró Cristián Moya, presidente de la Federación Chilena de Canotaje.

“Lo único que hizo fue cumplir con la resolución, el señor es un tipo que se descontrola… hay deportistas que dejaron de remar por su culpa. Lo de ayer no fue por nacionalidad ni raza, sino para separar a una manzana podrida”, agregó.

A fines de 2009, según cuentan desde la Federación, Rolando Rill fue despedido de sus funciones porque presentaba “muchos problemas con los deportistas”. Al momento que se le informa, éste agrede a Moya (quien ejercía también como mandamás de la entidad en ese tiempo), dejándolo con un problema en los oídos que lo obligó a someterse a operación.

Por esta razón Rill fue condenado en septiembre de 2010, tras acusación del Ministerio Público, por el delito de lesiones menos graves, en grado consumado, aplicándole una multa de once unidades tributarias mensuales que el cubano pagó en once cuotas.

Lo anterior no es desconocido por Mailliard, quien de todas formas cree que el trato recibido hacia su entrenador no tiene justificación.

“Le dije (a Muslow) que era un falta de respeto y un ordinario. Rolando es una persona súper decente, directo y que no acepta que pasen a llevar a los deportistas. Tengo la necesidad de apoyarlo”, indicó.

Mailliard, que reitera que este episodio “es discriminación por donde se le mire”, espera no sufrir represalias por parte de la Federación, teniendo en cuenta que en la jornada de ayer abrochó la clasificación al Panamericano específico y a los Bolivarianos de Santa Marta en los 500 metros.

“Espero que la Federación no me reprima, que sus problemas personales no me pasen a llevar como deportista”, cerró.