María Fernanda Valdés, pesista nacional que sufrió un inesperado bullying tras regresar del Panamericano de Miami, conoció el nombre su segunda agresora.
Según informa La Tercera, la patinadora Romina Pérez fue la otra persona que rayó el vehículo de Valdés cuando éste se encontraba estacionado en el Centro de Alto Rendimiento (CAR). Recordemos que al llegar al lugar la pesista encontró que su auto tenía fuertes insultos escritos en los vidrios: “Baja de peso guatona culiá”, “chupalo” y “maraca”.
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Para llegar a ese nombre fue necesario revisar el video captado por las cámaras de seguridad del recinto en que se ve a la deportista junto al pesista paralímpico Jorge Carinao, quien anteriormente había reconocido su participación en este acto. “Estoy arrepentido, me da vergüenza lo que pasó. Fue una cuestión de cabro chico que hice con más gente”, dijo.
“Estoy con una sensación igual que ayer, extraña. Vi las imágenes y claramente aparece (Jorge) Carinao y la patinadora, que la verdad no sé quién es. Fue el viernes 21 a eso de las 20 horas. La verdad es que quiero que termine esto, ha sido mucho y sólo quiero entrenar”, señaló Valdés al citado medio.
Miembros de la Policía de Investigaciones (PDI) estuvieron en la revisión de imágenes, donde además interrogaron a Valdés y señalaron que esperan a la fiscalía para ver si lo realizado por Carinao y Pérez constituye un delito.
Sin embargo, la doble medallista de oro del último Panamericano de levantamiento de pesas manifestó que no demandará a sus colegas para estar cien por ciento concentrada en lo deportivo.
“No interpondré una demanda porque eso implica mucho desgaste físico y mental. Ahora me tengo que concentrar para los Juegos Bolivarianos y el Mundial, en diciembre. Sólo espero que cada uno quede con la conciencia de que lo que hizo estuvo mal. Que cada acto tiene su consecuencia. Esto no puede volver a pasar”, expresó.
