No hay mal que dure cien años y eso bien lo sabe el estadounidense, Ryan Lochte, quien regresó a las piscinas olímpicas luego de haber cumplido con la suspensión de 10 meses que lo mantuvo fuera de las aguas.

Eso sí, esta no es la única buena nueva que hay para contar puesto que Lochte, quien fue sancionado por inventarse un asalto en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, acabó quinto los 100 metros espalda en el US Open de Nueva York, luego de registrar un crono de 55”16.

“Este es un buen punto de partida”, partió señalando el estadounidense después de su actuación, quien además agregó que “eso es lo que quería hacer al venir a esta reunión. Poder competir además de entrenar”.

Si bien el norteamericano aún está lejos de su plusmarca de 49”99, sabe que la paciencia y tranquilidad harán que pueda volver, en gloria y majestad, al alto nivel de la natación mundial.

“Pase lo que pase, tendré que estar vigilante”, indicó Lochte apuntando a un retorno al más alto nivel para los Juegos de Tokio 2020.

Cabe recordar que el seis veces campeón olímpico vivió una de sus experiencias más humillantes en Río 2016, instancia en la que afirmó haber sido asaltado por unos falsos policías cuando retornaba a la villa olímpica pero las cámaras demostraron lo contrario. Y que lo que realmente había ocurrido era que él, junto a tres compañeros más, orinaron una estación de servicio, lo cual terminó en un enfrentamiento con los guardias de seguridad.

Una lamentable situación de la cual, sin embargo, el nadador sacó un importante lección.

“Una de las cosas más importantes que aprendí durante este año es que yo soy un luchador. Sé que me levantaré. Y estoy de vuelta”, cerró.