Sergio Agüero se matriculó con un golazo en la victoria del Manchester City sobre el Arsenal, por 3-0, en la final de la Copa de la Liga en Wembley.

El trasandino recibió el balón y con esa clase que poseen los grandes realizó un ‘sombrerito’, venciendo al meta Ospina.

Sin embargo, lo que llamó la atención fue la tremenda asistencia del portero nacional Claudio Bravo.

El chileno sacó desde su arco, habilitando al argentino para marcar el primer tanto del partido.