Una jornada para el olvido vivió Marcelo Bielsa en el inicio de la Ligue 1 con el Lille. Y es que sus pupilos no solo cayeron por 3 tantos a 0 ante el Estrasburgo (recién ascendido), sino que también terminaron con un hombre menos y más de un incidente en cancha.

En el primer tiempo del encuentro, el “Loco” se vio obligado a hacer dos cambios luego de que Thiago Mendes (11′) y Kevin Malcuit (17′) presentarán dolencias físicas, relevos que por cierto generaron más de una irregularidad dentro del equipo, el que de ahí en adelante no volvió a encontrar su norte.

Tanto fue la imprecisión y los errores del equipo que en una simple jugada, Ballo Toure cedió de manera inacertada el balón a su guardameta Mike Maignan, hecho que no solo le pudo haber costado un tanto en contra, sino que también un gran disgusto al trasandino.

Tras esto, el ex estratega de la “Roja” optó por sacar al mismo Toure en el minuto 38 de juego, agotando con ello todos los cambios permitidos.

Ya en el complemento las cosas parecieron no variar mucho, puesto que en los primeros minutos el Estrasburgo ahogó al Lille.

Si bien el portero del conjunto francés sacó dos balones claves en la primera parte de la segunda mitad, terminó siendo expulsado por una agresión a Corgnet, lo cual no solo dejó al equipo de Bielsa con 10 hombres en cancha, sino que también con los tres palos totalmente descuidados.

Luego de este incidente, el rosarino decidió poner a De Preville, su delantero centro, como portero. Si bien esto no lo hizo mal, porque incluso le tapó un mano a mano a Gonçalves, nada puso hacer ante la apertura de la cuenta.

Al ver que el resultado no le iba bien y menos con un atacante en la portería, el “Loco” decidió poner a Amadou, su central, de portero y cambiar a De Preville a su puesto original.

No obstante ya nada había que hacer, puesto que pese a los esfuerzos, el argentino no pudo impedir que su central evitara los otros dos tantos que el Lille recibió. Uno desde los doces pasos y el otro desde un lanzamiento de distancia.

Una jornada gris para el rosarino que vio, como en tan solo 90 minutos, agotó los cambios, se le lesionaron dos hombres, perdió a su portero y le anotaron tres tantos.