El capitán de la selección mexicana de fútbol, Rafa Márquez, fue sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por mantener lazos con el narcotráfico, informó este miércoles el organismo norteamericano.

Márquez, actual capitán del Atlas mexicano y exjugador del Barcelona de España, forma parte de una lista de 22 personas y 43 entidades, entre ellas el Grand Casino de Guadalajara y un club de fútbol, sancionadas por haber participado en una red de narcotráfico liderada por el mexicano Raúl Flores Hernández, según el Departamento del Tesoro estadounidense.

“El conjunto de los bienes de esas personas, así como de las entidades, han sido congeladas mientras que los ciudadanos estadounidenses tienen prohibido negociar con ellos”, añadió.

El Departamento del Tesoro sostiene que Flores Hernández mantenía vínculos con el cártel de Sinaloa, cuyo excapo Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, uno de los narcotraficantes más poderosos del mundo, fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2017.

“Flores Hernández mantenía alianzas estratégicas con los líderes del cártel de Sinaloa así como del cártel de Jalisco Nueva Generación. Sus relaciones con los líderes de estos cárteles permitieron a Flores DTO (Organización de Tráfico de Drogas de Flores) operar desde la década de 1980 en Guadalajara, Jalisco, y Ciudad de México”, apuntó el comunicado.

Márquez, de 38 años, así como el famoso cantante mexicano Julio ‘Julión’ Álvarez, son acusados de actuar en nombre de Flores Hernández y de tener lazos con él desde hace tiempo.

“Ambos individuos tienen relaciones desde hace tiempo con Flores Hernández y han actuado como testaferros para él y su organización y han mantenido activos en su nombre”, explicó.

Las autoridades estadounidenses subrayaron que estas sanciones tienen lugar tras varios años de investigaciones junto a sus homólogos mexicanos.

“Raúl Flores Hernández operó desde hace décadas gracias a sus relaciones con otros cárteles de la droga así como la utilización de testaferros para enmascarar sus inversiones en el tráfico de drogas”, dijo el director de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC) John E. Smith.

Tras conocerse la noticia, entre la afición en la calle y las redes sociales se percibía un ambiente entre de incredulidad y decepción por las acusaciones contra Márquez, un ídolo deportivo mexicano.

“Está muy mal porque es un ejemplo para los niños”, comentó a la Agencia France-Presse Fernando, un joven mexicano que viste la casaca del Barcelona.

En su defensa, Mario Rodríguez, un limpiador de zapatos del centro histórico de la capital mexicana, consideró “absurdo, sinsentido” que Márquez esté involucrado con el crimen. “Un personaje que por México dio buenos resultados”, levantó a México en el deporte.