Una casualidad increíble, inexplicable. Hace menos de un mes, un grupo de mujeres (esposas de los jugadores fallecidos del Chapecoense) se tatuaron un avión con un corazón, pues se habían organizado para realizar un viaje a Punta Cana el próximo 9 de diciembre.

Doce futbolistas, con sus respectivas parejas, habían previsto unas mini vacaciones. Pero el destino quiso otra cosa y hoy, ese tatuaje que representaba aquella bonita idea, se ha transformado en el símbolo de una fatalidad que llevarán inmortalizado en sus cuerpos.

Esta historia, hasta ahora desconocida, la relató a Caracol TV la esposa de Cléber Santana, Rosangela María Loureiro.

La mujer agregó que el tatuaje era por el motivo del viaje de fin de año, algo que no pudo concretarse pues Santana, junto a casi la totalidad del plantel, falleció en el accidente aéreo.

“Nos íbamos para Punta Cana ahora el 9 de diciembre. Todas las esposas tenemos un corazón con un avión dentro. Es algo para pensar, un corazón y un avión…”, dijo.

Además, relató como se enteró del accidente y de paso comentó que prefieren haberse muerto todos para no sufrir tanto.

“Me llamó la esposa de un jugador para anunciarme que el avión había caído. Luego, todas comentamos que hubiéramos preferido haber muerto todos juntos para no tener que pasar este sufrimiento solas”, cerró.

Infobae
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