James Rodríguez jugó su propio partido ayer en el Bicentenario de San Juan ante Argentina. El capitán de Colombia estuvo lejos de gravitar y se enfrascó en una serie de discusiones que lo ‘sacaron’ del compromiso.

El volante del Real Madrid quedó molesto con la amarilla que recibió luego del altercado que protagonizó con Gabriel Mercado (28′).

“Mal partido, hijo de puta”, le dijo al lateral del Sevilla.

Según medios colombianos, James consideró que el ex-River Plate era el merecedor de la tarjeta debido a la falta que le cometió.

Con el primer tiempo terminado, el goleador del Mundial de Brasil 2014 le reclamó al árbitro ecuatoriano Roddy Zambrano mientras se dirigía a los camarines. En el video se reflejó la ofuscación del zurdo, que sólo apareció en el complemento con un tiro libre que dio en el palo.