A los 25 minutos Brasil inclinó la balanza sobre Argentina y el Mineirao se vino abajo. Philippe Coutinho infló las redes tras un gran remate que dejó sin posibilidades a Chiquito Romero quien se quedó mirando cómo la redonda se iba al fondo.

Neymar y compañía pudieron sonreír primero en casa, y de moemnto Messi, solo deberá esperar para abrazarse junto a sus compañeros, en un partido que ya cumple con las expectativas previas al compromiso.

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