La Copa Libertadores despierta las pasiones de todo el continente sudamericano. En la jornada de ayer se dió inicio a una nueva edición con tres partidos de la ronda clasificatoria.

Los últimos en salir a la cancha fueron el Oriente Petrolero de Bolivia frente al Universitario de Perú. Tras 90 minutos, los altiplánicos se quedaron con la victoria por 2-0 con las anotaciones de Héctor Sánchez, a las 28 minutos de la primera parte, y del uruguayo Maximiliano Freitas, a los 78.

El duelo tuvo de todo. Expulsiones por ambos lados, un estadio repleto y grandes goles en una noche redonda para el equipo boliviano. Sin embargo, el momento del partido se vivió luego del segundo gol anotado por Freitas.

El uruguayo había ingresado hace menos de dos minutos a la cancha de juego, y se encargó de anotar el tanto del triunfo en el primer balón que tocaba.

La euforia se desató en el estadio y del propia Freitas , quien protagonizó una celebración de antología, luego de ir hacia la galería de la barra local y subirse junto a algunos compañeros a un auto que estaba estacionado junto a la pista de atlética.

Poco falto para que los bolivianos apretaran el acelerador del vehículo de uno de los auspiciadores, quizás, para acercarse más al objetivo final de llegar a la fase de grupos de la Libertadores. Al menos, lo seguro, es que quedó un momento que será difícil de olvidar.

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