El defensor del FC Barcelona, Gerard Piqué, dejó a su equipo con un jugador menos tras ser expulsado por hacer un gol con la mano.

Cuando se jugaba el minuto 42 del duelo por la Champions League ante Olympiacos, el central catalán puso su mano derecha para mandar el balón al fondo de las redes luego del rebote dejado por el portero Silvio Proto ante el remate de Gerard Deulofeu.

El árbitro William Collum le mostró la segunda amarilla y como lo había amonestado a los once minutos, el juez cumplió con el reglamento y lo mandó a las duchas.

Cabe mencionar que el Barcelona venció a los griegos por 3-1 con autogol de Dimitros Nikolaou (18′, a los 89′ convirtió para su equipo) y tantos de Lionel Messi (61′) y Lucas Digne (64′).