Es muy común en el mundo del fútbol que en momentos difíciles de un partido un jugador reúna a sus compañeros para motivarlos a conseguir un objetivo. Puede ser antes o en medio del encuentro, como en una definición a penales.

Esta actividad es asumida por el líder del equipo, frecuentemente el capitán o el futbolista de mayor experiencia. En la tanda desde los doce pasos en la final de la Copa América Centenario no fue la excepción, al menos en la selección chilena. El encargado de la arenga de ‘La Roja’ no podía ser otro que Claudio Bravo.

“Ya les ganamos muchachos. Otra vez. No nos dejemos nada. Llegamos acá con huevo, porque queremos. Por aguantarnos un mes huevon, un mes. Han pasado 100 años para ganar esta huevada. Hoy la vamos a ganar y nos vamos a ir felices ¡Vamos!”, lanzó el portero, rescata Canal 13.

Al final la historia la conocemos: Chile ganó 4-2 y se llevó su segundo título internacional.