Lo que debía ser un verdadero golpe en el mercado se ha convertido en un enorme dolor de cabeza para Samsung.
Nos referimos a su nuevo Galaxy Note 7, smartphone que ha presentado serios riesgos de explosión de la batería, lo que ha obligado a la empresa a tomar la radical medida de suspender su producción.
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Esta decisión fue adoptada en coordinación con las autoridades de protección del consumidor de Corea del Sur, Estados Unidos y China, indicó la fuente que requirió el anonimato a la agencia Yonhap.
Llama la atención que un dispositivo con un diseño aparentemente inofensivo, termine convirtiéndose en un serio riesgo para nuestra salud.
Anteriormente ya hemos conocido otros casos similares a los de Samsung, en los que productos a los que sus ejecutivos le auguraban un gran futuro, por una u otra razón terminaron fallando terriblemente.
1- Hoverboard
Se transformaron en uno de los juguetes más populares del último tiempo, y millones de adolescentes alrededor del mundo quisieron tener uno.
Nos referimos a las patinetas eléctricas, o “Hoverboard”, las que a pesar de su novedosa función estuvieron envueltas en graves accidentes.
De acuerdo al diario inglés Daily Mail, en la ciudad de Bulkington en Reino Unido, una madre y su hija resultaron quemadas producto de un incendio que afectó a su vivienda. El siniestro se habría producido luego de que las baterías de un hoverboard eléctrico explotaran súbitamente.
Las baterías con base de litio de estos productos han estado en el ojo del huracán debido a su peligrosidad. Por alguna falla de diseño, en muchos casos no aguantaron el proceso de recarga y terminaron quemándose.
De hecho, en diciembre un usuario subió a Youtube un video en el que se ve cómo su patineta -después de sólo tres días de uso- se quema sin razón aparente, en Alabama, Estados Unidos. Este tipo de incidentes llevó a Amazon a sacar estas patinetas de su catálogo.
2- Play 3
Lanzada en noviembre de 2006 en Estados Unidos, la Playstation 3 contó originalmente con dos versiones, la básica de 20 GB y una versión de 60 GB que además poseía otros detalles (compatibilidad con juegos de Playstation 1 y 2, además de un doble puerto USB).
A pesar del enorme impacto que tuvo la consola en los jugadores, al poco tiempo diversos usuarios comenzaron a notar ciertas fallas en el funcionamiento del hardware. Básicamente sus Playstation mostraba una luz amarilla y luego se apagaba.
Tres años después de su lanzamiento un reporte llevado a cabo por la cadena británica BBC ahondó en la conocida como “luz amarilla de la muerte”, la que afectó a menos del 0,5 de las consolas en el Reino Unido.
Esta luz, que bajo un normal funcionamiento de la Playstation debía ser verde, indicaba que había un error no identificable lo que dejaba al sistema inutilizable. O dicho de otro modo: un error de fábrica hacía “dormir eternamente” a la querida consola.
En algunos foros especializados indican que esta luz aparece cuando la placa madre se quema, lo que en palabras simple significa la muerte de la consola.
3- Dell
Fue en 2006 cuando Dell vivió una experiencia similar a la de Samsung. Mientras se desarrollaba una conferencia ante los medios, repentinamente uno de los notebooks que la compañía presentaba explotó.
Según reveló el sitio especializado The Inquirer, el aparato estuvo en llamas por 5 minutos. Este hecho marcó un precedente porque fue un llamado a las grandes firmas de que incidentes de este tipo podrían dar la vuelta al mundo en cuestión de minutos gracias al internet.
Un vocero de la compañía indicó en aquella oportunidad que las baterías habían sido fabricadas por Sony e incluidas en computadoras que salieron a la venta entre el 1 de abril de 2004 y el 18 de julio de 2006.
Cabe señalar que en diciembre de 2005 Dell ya había anunciado el retiro de 22.000 baterías de notebooks por riesgo potencial de incendio.
4- Adaptadores de Apple
En julio de 2014 el Sernac alertó que Apple le había informado de un problema de seguridad en los adaptadores de corriente para algunos de sus productos.
Se trataba de los adaptadores de corriente USB para el iPhone 3GS, iPhone 4 y iPhone 4S, modelo A1300, los cuales fueron distribuidos en Chile entre octubre de 2009 y septiembre de 2012.
Básicamente el problema era que tenían un alto riesgo de recalentamiento del aparato, alcanzando temperaturas muy elevadas para el tacto de las personas.
“Para identificar si el adaptador está afectado, se debe observar la etiqueta que se encuentra entre las clavijas del adaptador. El adaptador afectado responde al número A1300 y las letras “CE” aparecen en color gris sólido”, apuntó el Sernac en aquella oportunidad.
Esto llevó a la empresa a comenzar un proceso de sustitución del producto por un adaptador nuevo y rediseñado, de forma gratuita. “Para hacer efectiva la sustitución, los consumidores deben llevar el adaptador a una tienda Apple Store o a un proveedor de servicios autorizado Apple”, afirmaron.
5- Palm Foleo
Si bien en este caso el producto no se sobrecalentó ni mucho menos “explotó”, si se convirtió en un fracaso para la compañía, al punto de que ni siquiera alcanzó a salir a la venta masiva.
En mayo de 2007 Palm Inc. anunció su nuevo dispositivo Palm Foleo, un “acompañante para el móvil”.
Básicamente, la idea de este dispositivo era la de ampliar las funciones de sus smartphones, como por ejemplo el acceso al correo electrónico.
Sin embargo desde un comienzo la idea fue criticada por los especialistas. Si bien tenía un tamaño inferior -aunque no por mucho- al de los computadores portátiles de esos años, sus especificaciones nunca pudieron convencer.
Y sus ejecutivos no se esforzaron mucho por disimularlo: fue en una presentación cuando Jeff Hawkins, fundador de Palm, reveló que si pudiera hacerlo otra vez, “le pondría un procesador más rápido”.
El sitio especializado Silicon publicado en 2007 un artículo en el que se indicó: “Y encima, su escasa potencia no se compensa con una vida de batería increíble. Que un producto así sólo dure 5 horas, cuando por su tamaño y limitaciones debería tener mucha más capacidad, no sólo es sorprendente. Es hasta triste”.
Palm Foleo terminó convirtiéndose en un rotundo fracaso: Ed Colligan, presidente de aquel entonces de Palm, anunciaría posteriormente que el proyecto se cancelaba oficialmente para centrar los esfuerzos de la compañía en los smartphones. Tres años más la empresa fue comprada por Hewlett-Packard.
