Vueltas

Vueltas de la vida. Parece oportuno recordar cómo se gestó el aislamiento del PC en 1989 y al mismo tiempo desear que ninguna fuerza aliada se exponga hoy al mismo destino. Como entonces la única beneficiada sería la derecha.

Desde fines de 1988 los recién formados Concertación (DC, PPD, PS-Arrate, Humanistas y otros) y Partido PAÍS (PC, PS-Almeyda, IC, PR, MIR) habían venido desarrollando una intensa negociación que hacia mediados de 1989 había culminado en el acuerdo de una lista parlamentaria única. Demás está decir que en la misma se impuso al PC la “máxima generosidad”, obligándolo a entregar muchísimos más apoyos que los que comprometía a cambio.