Cumplida casi la mitad del mandato de Michelle Bachelet, las declaraciones del ministro Nicolás Eyzaguirre a El Mercurio revelan que la actual administración asume que no podrá cumplir con todas las promesas de campaña.
Esas promesas se tradujeron en el programa, considerado como sacrosanto por el actual oficialismo. Lo que fue una “verdad revelada” ahora quedará como documento de referencia. Ese programa, en palabras del senador Jaime Quintana, buscaba “destruir los cimientos anquilosados del modelo neoliberal de la dictadura”.
Lo que reconoce Eyzaguirre -y la nueva mayoría de la Nueva Mayoría- no es que eso deberá esperar, sino que ese carácter refundacional es el que ahora se descarta. La realidad pesa más que los sueños.
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