Sucedió en el último pasaje del concierto, cuando Radiohead ya se despedía del Estadio Nacional, pero se convirtió en uno de los momentos más genuinos de los casi 140 minutos que duró la presentación.

Cuando vino el turno de Karma Police, el último track que la banda interpretó anoche en su regreso al país, la garganta le jugó una mala pasada a Thom Yorke, su vocalista, haciéndole soltar uno que otro “gallo” de cara al micrófono y durante uno de los cimax de la canción.

Inesperadamente, y para sorpresa de los fans que lo vieron desde las primeras filas, Yorke agachó la cabeza para botar una risa nerviosa, casi de desaprobación, en una secuencia que generó gritos, más risas y comentarios entre la audiencia.

Lejos de convertirse en un momento incómodo, o desprolijo, el error se desdibujó en una de las escenas de complicidad más concretas de la noche, con un Yorke que tras un lúdico estornudo buscó las caras y expresiones de los presentes, al mismo tiempo en que el bajista Colin Greenwood se reía de la situación.

Un “ji ji ji ji, ji ji ji ji”, en tono burlesco, fue la única respuesta del músico mientras las más de 40 mil personas seguían la letra del tema cantando “this is what you’ll get”, desde sus puestos. La escena se repitió dos veces antes que Yorke retomara el pulso de la canción, y luego, vino la despedida definitiva. El público presionó un último regreso entonando “I lost myself, I lost myself”, pero la jugada no tuvo efecto: el concierto ya había terminado.

La escena se puede ver a partir de los dos minutos con cincuenta segundos, en el siguiente video.

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