El sábado 29 de octubre Guns N’ Roses selló un nuevo capítulo de su relación con Chile en un multitudinario concierto en el Estadio Nacional. Fue la cuarta vez de la banda de Axl Rose en Santiago tras sus visitas de 1992, 2010 y 2011. En Ñuñoa se reunieron de nuevo Rose, Slash y el bajista Duff McKagan, trío fundacional de la banda, pero también más de 66 mil fanáticos de todo Chile que recibieron a “la banda más peligrosa del mundo”.

A continuación, cinco momentos del concierto de Guns N’ Roses en Chile, en el marco de Not in this lifetime…, la gira que trajo de vuelta a la formación estelar.

1- It’s so easy y dibujos animados. Es la canción que viene abriendo la gira Not in this lifetime…, y la que reprodujo la mayor cantidad de gritos de la noche sabatina. La banda ingresó al escenario en silencio y se dio a conocer con los instrumentos ya activados al son de la emblemática canción de Appetite for Destruction, el álbum que durante la cita santiaguina se escucharía casi entero. Antes de eso, para marcar el inicio del recital, la banda optó por el opening de la serie animada Looney Tunes.

2-Saludo a Pink Floyd. Ya avanzado el show, cuando se habían escuchado más de una decena de canciones en vivo, Slash tomó protagonismo con una interpretación en su estilo de Wish you were here, canción insigne de Pink Floyd. El momento se tradujo en historia y atmósfera. Y también en un momento digno de filmar: a penas sonaron los primeros acordes, cientos de celulares apuntaron la escena y capturaron la instantánea. En el dueto guitarrero, lo acompañó el músico Richard Fortus.

3- Homenaje a Nino Rota. Desde hace años Sweet child o’ mine es uno de los momentos más esperados en los conciertos de Guns N’ Roses. Y a esta altura, también su introducción: antes del solo que da inicio al tema, Slash interpreta la música principal de la película El Padrino, original del compositor Nino Rota, en un punteo que mediante distorsión aborda el imaginario de la mafia italiana. El recurso lleva años. Tanto así que Slash lo utilizó en su concierto de 1992 en el mismo Estadio Nacional, tal como testifica un video de YouTube.

4- La comunión de los fans en Civil War. Un clásico no tan usufructuado por las radios pero igual de emblemático es Civil War: la balada de Use Your Illusion II que desde su debut obsesionó a los fans de los ochenta, ya sea por el tempo progresivo o el bagaje de su lírica. En el Nacional la canción fue un himno coreado hasta las amígdalas por los más de 60 mil fans. El solo de Slash, a la mitad del tema, se erigió como una de las cúspides de la noche, y fue también un argumento para que fanáticos de todas las edades ejecutasen guitarras imaginarias en el aire.

5- Paradise City y el final. Con Paradise City, Guns N’ Roses dio por cerrado su cuarto concierto en Santiago. El público lo intuía. Ya habían vuelto de los vestidores para ofrecer las últimas tres canciones de la noche: Don’t CryThe Seeker (un cover de The Who que fue incluido en la gira) y la pista seis de Appetite for Destruction. Saltos y gritos por doquier para despedir a la banda, que se fue entre papeles de colores, fuegos artificiales y centenares de aplausos al unísono.