La historia se hizo famosa en la Teletón de 2015, cuando Adrián Martín Vega cantó flamenco a sus 10 años y estremeció a todo Chile. A pesar de la hidrocefalia, y la malformación congénita que sufre a diario, arriba del escenario se transformó en un cantaor carismático, como el mejor de los intérpretes españoles del género.
El niño malagueño que suma y suma elogios a través de sus videos en redes sociales, ahora luce un nuevo hito en su carrera: fue nominado a un Latin Grammy como músico profesional. Esto, a raíz de Lleno de vida, el álbum que editó en abril de 2016.
La placa fue un éxito en popularidad y crítica y por lo mismo fue una carta válida para el jurado que definió a los nominados de la categoría Mejor Álbum Vocal Pop Tradicional 2016. ¿Sus competidores? Puros pesos pesados: Andrea Bocelli, Diego Torres, Andrés Cepeda y Juan Gabriel.
La calidad musical de Adrián es a toda prueba: con más de 15 operaciones en el cuerpo a sus 11 años (su edad actual), no se hace problema para ejecutar la batería y el cajón español con absoluta normalidad.
El 17 de noviembre, en la ceremonia de entrega de trofeos, se sabrá si Adrián da el golpe a la cátedra. En Chile, sus fans estarán atentos. Los mismos que lo recuerdan por su versión de Qué bonito, original de Rosario Flores.
