El nuevo álbum de DJ Khaled, “Major Key”, destronó a Drake en las preferencias de los estadounidenses al ser el más vendido, una primicia para el productor de hip hop cuya carrera se disparó en los últimos meses.
Su noveno y último disco vendió 95.000 copias -físicas, descargadas y por streaming- la semana pasada y se apoderó del primer lugar de la lista Billboard, según datos difundidos el domingo por Nielsen Music.
“Major Key” debe su éxito en gran medida a las colaboraciones de conocidos raperos, desde Jay Z hasta Drake, pasando por Kendrick Lamar y Nicki Minaj.
DJ Khaled, de 40 años, trabaja desde hace años con estrellas del rap, pero nunca había alcanzado un éxito como este con uno de sus álbumes.
Desde 2015, su carrera experimentó un ascenso meteórico gracias, entre otras cosas, a los videos humorísticos que publica en Snapchat.
En una serie de mensajes en Instagram la noche del domingo y el lunes, el rapero nacido en Argelia celebró su éxito en la cartelera de los más vendidos y aprovechó para afirmar que algunos lo han tratado de mantener al margen del éxito.
El productor, cuyo verdadero nombre es Khaled Mohamed Khaled, es hijo de palestinos y creció en Orlando, Florida. Es uno de los musulmanes más destacados de la industria musical estadounidense.
DJ Khaled, que se hizo conocido en las discotecas de Miami en la década de 1990, ha tomado ocasionalmente la palabra para apoyar la causa palestina, aunque en su música no habla de política.
Con “Major Key” arrebató el trono de Billboard a uno de sus colaboradores en el disco: el rapero canadiense Drake, cuyo disco “Views” se colocó en el primer lugar durante 12 semanas -no consecutivas- y se convirtió en el álbum de 2016 más vendido en Estados Unidos.
