Las actuaciones notables y la extraordinaria capacidad direccional para enlazar lo material y objetivo con la sugerencia y lo incierto, como parte de una misma realidad en una relación humana, se alzan como los logros mayores de esta propuesta sobre la obra de Jorge Díaz (1930-2007), Premio Nacional de Artes de la Representación 1993.

Y, junto con esto, un regreso de Cristián Plana al gran nivel de sus más destacados montajes que lo han llevado a ser uno de los directores chilenos de primera línea: “Comida alemana” y “Paso del norte”.

En este “Locutorio”, un hombre y una mujer, ambos enfrentados a la vejez, dialogan sobre cosas que, aparentemente, son comunes a ellos: el pasado que recuerdan y el presente que los separa.

""Locutorio" | GAM
“”Locutorio” | GAM

Aparentemente… Porque conviene tener en cuenta esta duda o interrogante inicial, ya que será el rasgo predominante de todo lo que sucede en este relato al interior de los cubos de vidrio individuales en que estos personajes están enclaustrados, donde nunca se tocan… Aparentemente.

No se sabrá si ella o él están en una celda, un asilo o en una pieza psiquiátrica u otro lugar que simbolice el abandono en la vejez y la soledad y/o la cercanía de la muerte; tampoco si forman un matrimonio o si ambos no son más que el invento de una mente que desfallece.

""Locutorio" | GAM
“”Locutorio” | GAM

Lo que sí tambien se advierte en la atmósfera onírica y poética que acentúa Cristián Plana en su puesta en escena, como filtrándose a través de la notable estructura formal, es la humanidad de las historias de Jorge Diaz, más allá de la ironía trágica o cómica que habitan sus textos.

Coherencia y diversidad

Millaray Lobos y Alejandro Sieveking son los protagonistas de un montaje que acepta dos formas distintas de actuar que se acoplan como lenguaje escénico coherente en su contrapunto.

El perfil actoral de ella, delicado y ondulante, esta vez se hace más intenso y notorio -subrayando cierta irrealidad-, mientras que él, hierático y solemne, parece (sólo parece) más anclado a la tierra.

Indudablemente, el diseño escenográfico de Sebastián Irarrázaval y la iluminación de Antonia Peón-Veiga y Matías López son fundamentales como soporte en esta puesta en escena de Plana.

Y, esta vez, no se mencionan para destacarlo como lo único rescatable del montaje, ya que es brillante y funcional como recurso técnico-artístico y, al mismo tiempo, tiene vida propia.

""Locutorio" | GAM
“”Locutorio” | GAM

Aunque los actores están separados dentro de un cubo de vidrio cada uno, la obra logra juntarlos, que se toquen y abracen, que el (no) diálogo sea visceral o lejano, en momentos… que lo real sea suplantado por lo fantasmagórico, lo incierto, que todo parezca una invención de la mente; que la espacialidad y visualidad inciertas que genera lleguen como otra dimensión de la realidad, tan “real” como asible son los objetos materiales… que los planos desconocidos del abandono, la vejez y la muerte o los momentos previos se vean tan impresionantes como la soledad objetiva.

Porque “Locutorio” puede verse con los ojos de la razón… Situada frente a un espejo que repite hasta el infinito las imágenes, desafiando cualquier concepto convencional de realidad.

GAM. Alameda 227. Miércoles, jueves, viernes y sábado, 21.00 horas. Entrada general $ 6.000; est. y terc. edad $ 3.000. Hasta el 17 junio.