En Mongolia, los animales salvajes son un rasgo permanente del paisaje. Y si esto lo reducimos a la tribu Dukha, el lazo se estrecha aún más. Dentro de su comunidad los renos son una parte fundamental del transporte, y los animales de caza, un eslabón básico en términos alimenticios.
Allí el frío abunda y las condiciones climáticas dificultan cualquier aspecto de la vida. La tribu Dukha, por su parte, trata de esquivarlas mediante una centenaria condición nómada. En su territorio (Altai, en la zona exterior de Mongolia, Asia Central) comparten espacio con otras comunidades, y sobretodo, con animales salvajes.
Con estos últimos la tribu Dukha ha creado un poderoso vínculo. Los habitantes han hecho un esfuerzo para vivir en armonía con una naturaleza peligrosa en apariencia: caballos salvajes, osos, águilas y lobos son algunos de sus huéspedes más connotados. Eso sí, los renos son los predilectos, sobretodo entre los niños.
La relación entre la tribu y las criaturas salvajes fue registrada por el fotógrafo Hamid Sardar-Afkhami, quien visitó y documentó la rutina de esta comunidad perdida en los confines. Las imágenes fueron recogidas por la web shareably, que además investigó la historia de estos habitantes.
En la serie fotográfica se muestra cómo los Dukha interactúan con el mundo natural sin mayores problemas. En su cosmovisión, el entorno vivo es una pieza trascendental. Y justamente este enfoque es el que se trasluce en el trabajo de Hamid Sardar-Afkhami, que se puede ver aquí abajo:
