Demi Lovato nunca ha tenido problemas para hablar de sus trastornos alimenticios y sus problemas con las drogas, sin embargo, nunca había sido tan honesta como en la reciente entrevista que concedió al portal Refinery29.
La joven artista de 23 años reconoció que mientras se encontraba en su época de mayor fama en Disney, su vida privada se convirtió en un lugar oscuro y lleno adicciones. Tocó fondo en 2010 cuando a los 18 años golpeó a un bailarín mientras se encontraba de gira con los Jonas Brothers por Camp Rock 2. Ese fue el momento en que decidió ingresar a rehabilitación.
Lovato aseguró que en esos días no podía estar una hora sin consumir cocaína y que se convirtió en una pesadilla para sus padres y equipo de trabajo. “Les decía, ‘traten de castigarme… yo pago sus cuentas’”, recordó la cantante. “Antes de volver a estar sobria, yo era una de esas personas que dicen ‘me importa una mierda, da igual’. Y usaba eso como una excusa para hacer lo que quería. Era una pesadilla para trabajar”, reconoció.
La artista estuvo tres meses en rehabilitación, donde se descubrieron otros problemas en ella que no habían sido diagnosticados con anterioridad. Trastorno bipolar fue uno de ellos, el cual se convirtió en uno de sus principales demonios. “Tuve que aprender de manera dura que ya no puedo ir a fiestas. Algunas personas pueden salir y no ser gatillada, pero ese no es mi caso”, señaló.
Hoy dice que su lugar feliz está en su sofá junto a su novio Wilmer Valderrama y viendo películas acurrucados. “Sé que mi vida suena aburrida, pero llegué a un lugar donde prefiero estar relajada que tener que arreglarme para ir a alguna fiesta o bar con gente que en realidad no se preocupa de mi bienestar”, agregó.
Para poder mantenerse en ese camino, la actriz ha tenido que tomar decisiones en todos los aspectos de su vida, incluyendo su deseo de ver el documental de Amy Winehouse. “¿Para ver polvo blanco? (…) Es demasiado gatillador”, explicó.
Pero más allá del drama, Demi insiste en que su principal foco es mantenerse fiel a ella misma y mantener su sobriedad. “Todavía tengo cosas que demostrar – no sólo acerca de las cosas que puedo hacer con mi voz”, dijo. “Algunas personas piensan que porque soy joven no puedo mantenerme sobria. Pero esas son cosas que quiero probarme a mi misma”, finalizó.
