Tras el mensaje que envió la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, al mandatario boliviano Evo Morales, en el marco de los conflictos que ha desatado el uso de las aguas del río Silala, el ministro boliviano de Defensa, Reymi Ferreira, anunció que su país protestará formalmente ante Chile y calificó a la edil nortina como “payasa”.

El pasado martes la Municipalidad de Antofagasta viralizó un video, donde Rojo con el mismo estilo del ex monarca español, Juan Carlos I, le dijo a Morales “¿pór qué no te callas?“. Dichos que desataron el enfado del país vecino.

Además agregó que “en mi calidad de alcaldesa y como chilena quiero comunicarle al señor Evo Morales que los chileno estamos cansadísimos de que esté instrumentalizando nuestra relación bilateral con objetivos internos mezquinos que lo único que logran es erosionar la relación que tenemos en Antofagasta con el pueblo boliviano”.

Ante lo cual, Ferreira sostuvo que “quienes nos insultan y agreden lamentablemente son ellos (…), sale ayer la payasa de la alcaldesa de Antofagasta insultando no sólo al presidente, sino insultándonos a todos los bolivianos“.

En el mismo marco, el ministro de Defensa aseguró que la querella se presentará, ya que “obviamente es inaceptable la forma en que actuó esa alcaldesa, además es ridícula porque ni siquiera es original. Está queriendo imitar lo que hizo el rey de España con el presidente Chávez en el pasado, ni siquiera tiene creatividad para ser agresiva”, cuestionó.

El ministro boliviano además aseguró que su país no sólo se ve afectado por “una agresión real, territorial y económica, sino también de una agresión moral”. Esto, haciendo alusión a la rutina del comediante Daniel Alcaíno, quien hace algunos días también se hizo parte de las burlas hacia Morales por los reclamos contra Chile, en cuanto a la soberanía del mar y el uso de las aguas del río Silala.

En la instancia, Ferreira argumentó que Chile estaría desarrollando una estrategia para hacer ver a Bolivia como un agresor, pese a que -acusa- es Chile quien tiene minada la frontera, desvió el caudal del río Lauca en 1962 y hace uso de los afluentes del río Silala, sin entregar remuneración al vecino Gobierno. Finalmente arremetió contra la base militar en Cariquima, asegurando que existe armamento de guerra, pese a que esa información fue negada este jueves por las autoridades chilenas.