La Brigada de Derechos Humanos llegó hasta Coquimbo para detener al suboficial (r) Juan Jorquera Abarzúa, por su participación en el homicidio de tres militantes del MIR, Lucía Vergara, Sergio Peña y Arturo Villabela, en septiembre de 1983.

En un domicilio particular se logró la detención del ex agente operativo de la CNI y suboficial en retiro del Ejército, Juan Jorquera Abarzúa, quien ingresó al Ejército en 1972 y pasó a la Escuela de Infantería hasta noviembre de 1973, fecha en que fue destinado a la DINA. Posteriormente, fue escolta de Augusto Pinochet hasta 1982, año en que fue enviado a la Unidad Sindical.

“Las diligencias fueron solicitadas por el ministro Mario Carroza, quien indaga la muerte de tres militantes del MIR, los que fueron acribillados en una casa ubicada en la comuna de Las Condes en Santiago, el 07 de septiembre de 1983″, indicó el jefe de la prefectura Elqui de la PDI, prefecto Abel Lizama.

Crímenes que se habrían concretado cuando Jorquera pertenecía a la División de Inteligencia Metropolitana, bajo las ordenes de Alvaro Corbálán y el coronel Roberto Schmied.

Una vez finalizadas las diligencias en Coquimbo, los policías, pertenecientes a la Brigada de Derechos Humanos de la Región Metropolitana, trasladaron vía terrestre a Jorquera hasta Santiago, donde deberá declarar frente al ministro Carroza, quien está a cargo del caso Fuenteovejuna.

Antecedentes

La causa por la que fue detenido el participante de la Operación Albania, Juan Jorquera Abarzúa, es una de las emblemáticas que investiga el ministro Mario Carroza.

En este mismo caso, el magistrado ya sometió a proceso a los ex agentes de la Central Nacional de Informaciones (CNI), Álvaro Corbalán Castilla, Aquiles González Cortés, Norman Jeldes Aguilar, Roberto Schmied Zanzi y Sergio Canals Baldwin, como responsables de los homicidios de los tres militantes del MIR.

Policía de Investigaciones

Policía de Investigaciones

Según dicta la resolución judicial, el hecho tuvo lugar cuando las tres víctimas “ocupaban una casa de seguridad ubicada en calle Fuenteovejuna 1330 de la comuna de Las Condes, y que en horas de la tarde del 7 de septiembre de 1983, resultaron muertos por los disparos efectuados por agente de seguridad de la CNI, quienes desde hacía al menos tres meses se encontraban efectuándoles seguimientos, lo que había permitido detectar su ubicación y detallar sus rutinas”, sostiene el fallo que permitió la detención de Jorquera.