La empresa Frontel se comprometió a reponer artefactos, pero sin indemnización, tras el alza de voltaje que dejó sin electrodomésticos a decenas de vecinos en Santa Juana, región del Bío Bío.

Sesenta y cinco familias de Santa Juana fueron afectadas por la quema de electrodomésticos, a raíz del alza de voltaje en la energía eléctrica el pasado 14 de abril, lo que abrió de inmediato un proceso de negociación entre la empresa Frontel y representantes de los vecinos.

Estos últimos solicitaron la reposición de sus cosas en base a la tasación que cada uno dispusiera y una indemnización de 100 mil pesos por el gasto que les había significado no contar con sus lavadoras, refrigeradores, televisores y otros artefactos.

Frontel accedió sólo a la primera petición, lo que fue destacado la representante de los vecinos Olivia Mora.

Y es que muchos vecinos anotaron el precio que les habían costado sus cosas al momento de comprarlas, cifra que no siempre coincide con lo que cuesta adquirirlos en la actualidad.

Sin embargo, el acuerdo no dejó satisfecho al alcalde de Santa Juana, Ángel Castro, quien acusó a la empresa de “aprovecharse de la debilidad de la gente” al no indemnizarlos.

Mientras, la preocupación está en la necesidad de terminar con los constantes cortes de luz e inestabilidad en el voltaje que puedan repetir este mal rato a los vecinos. Así como determinar la situación particular de la pequeña Nayadeth de 10 años, que está conectada a un ventilador mecánico las 24 horas del día y cuya salud puede verse afectada si los problemas con la energía eléctrica continúan.