Autoridades mexicanas rescataron a dos mujeres y a un hombre estadounidenses que fueron secuestrados hace casi tres semanas en Tamaulipas, uno de los estados más violentos del país, cuando estaban dirigiéndose por carretera a un funeral, informó este martes el gobierno del estado.

Los estadounidenses fueron liberados la noche del lunes tras un operativo conjunto de fuerzas de seguridad mexicanas que, al ser “agredidas” por los delincuentes, abatieron al presunto jefe de la banda y detuvieron a dos de los secuestradores, dijo en un comunicado el Grupo Coordinación Tamaulipas, que integra las fuerzas de seguridad desplegadas en esta región.

Las víctimas, descendientes de mexicanos en Texas -según confirmó a la AFP una fuente de la fiscalía estatal-, estaban retenidas en un campamento en un punto de la peligrosa carretera que conecta la capital del estado, Ciudad Victoria, con Tampico, a la altura del municipio de Zaragoza.

Los tres estadounidenses salieron el pasado 13 de abril de McAllen, Texas, para dirigirse a Valles, San Luis Potosí, “a efecto de asistir a un servicio funerario” y cuando circulaban por esa carretera “fueron interceptados por sujetos armados”, explica el comunicado.

“Durante los siguientes días se les dio seguimiento a los delincuentes en coordinación con las autoridades de San Luis Potosí y con el apoyo de la Policía Federal, Secretaría de la Defensa Nacional y Fuerza Tamaulipas”, añade.

Los dos secuestradores detenidos, uno de 27 años y otro de 19, “continúan bajo investigación porque se tiene la presunción de que participaron en otros secuestros cometidos en diversos puntos” de esa peligrosa carretera.

Tamaulipas, que bordea el Golfo de México, es desde hace años uno de los estados más violentos de México debido a la presencia de los cárteles antagónicos del Golfo y Los Zetas, que se disputan el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.

Para brindar seguridad, en 2013 la Policía Federal lanzó operativos para escoltar a vehículos de civiles en algunos puntos de las temidas carreteras del estado, donde se registra el mayor número de los más de 25.000 desaparecidos del país.