Del cineasta rapa nui Leonardo Pakarati, el documental muestra en forma simple el sentido profundo de la memoria, de los ancestros y sus creaciones, de la cultura y la familia en Isla de Pascua.
Te kuhane o te tupuna no tiene quizás las hermosas imágenes y paisajes de Surire, o la profundidad intelectual de El botón de nácar, pero a través de sus testimonios como los del abuelo Bene, la niña Mika o de tía Noemí Pakarati, entre otros, se va mostrando –en su diversidad- la mirada profunda sobre la vida de los pascuenses, donde el Mana y los Tapu son fundamentales.
“Ella (Noemí Pakarati ) me contó que los espíritus de nuestros ancestros estaban intranquilos, que caminaban perdidos, buscando huesos que faltaban a sus cuerpos muertos, no encontraban sus cabezas ni sus costillas; incluso los grandes Moai ya no estaban y ahora se encuentran lejos de la isla, en otros países, guardados en oscuras bodegas donde el Mana que contienen espera por regresar a Rapa Nui. No era la primera vez que escuchaba a mis familiares hablar del Mana y la importancia de esta energía, conocida en toda la Polinesia. Muchos creen que está dormida y que con la vuelta de objetos Tapu [sagrados] despertará en beneficio de las personas. De ahí surgió la idea de hacer un viaje para conectar a las nuevas generaciones con estos objetos de sus ancestros, y realizar una ceremonia para pedir que el Mana regrese con nosotros a la isla. Hacer, de alguna manera, lo que los antiguos polinesios hicieron al navegar por todo el Pacífico confiando en el Mana y dejando relatos de sus épicos viajes”, cuenta Pakarati.
En Te kuhane o te tupuna se entrevista a científicos sobre la cultura Rapa Nui y el moai Hoa Haka Nanaia, que desde 1868 está en Londres, que permite hablar y profundizar sobre esta cosmovisión, darle continuidad y acción, un foco.
El documental también registra el deseo y el viaje a Inglaterra para ir a ver -y pedir el retorno- del moai Hoa Haka Nanaia, en el deseo de hacer volver el poder o Mana de los ancestros que está impregnado en los objetos culturales, mucho de los cuales están fuera de la Isla.
El documental, siendo sencillo en sus imágenes, en su forma de relato, su estructura, el lenguaje utilizado, presenta gran diversidad de temas que se abordan de manera profunda y muy humana.
Un documental que debiera tener una gran difusión y transformarse, además, en material pedagógico en colegios y centros de educación superior.
