Una vía en doble sentido tiene habilitada la concesionaria Valles del Bío Bío, desde el cruce Florida – Bulnes hasta la entrada de Yumbel, por la autopista Concepción-Cabrero para el tránsito de autos, buses y camiones.

Lo paradójico es que esta empresa terminó la ampliación de la ruta hace más de un año y hay otras dos pistas que están cercadas con vallas demarcadoras y no pueden ser usadas.

Precisamente, siempre sólo uno de estos caminos se pone a disposición de los conductores, ya sea el que va en dirección a Cabrero o el que va en dirección a Concepción, pero nunca ambos.

Además existiría muy poca señalización respecto a la velocidad máxima con la que deben transitar los vehículos, por lo que prácticamente correrían por la pista, sobre todo pasando el peaje Quillaimávida, ubicado en el kilómetro 34 de la ruta, el cual tampoco está habilitado.

Fue en ese lugar donde dos personas murieron luego que un automóvil colisionara de frente con un bus interprovincial que se dirigía a Yumbel.

Celia Fierro, vecina del sector, señaló que los accidentes son una constante, ya que algunos conductores buscan adelantar pese a que hay una sola vía.

Los conductores y vecinos aseguraron que es inaceptable que no se entreguen las vías que están terminadas, porque con ellas se podrían evitar accidentes como los registrados durante el período de construcción de la nueva autopista.

Desde la concesionaria explicaron que entregarán la ruta una vez que esté completamente terminada. Sin embargo, los vecinos sostienen que al menos se podría instalar señalética que impida la ocurrencia de graves accidentes.