Este martes se registraron una serie de tres explosiones en Bruselas, capital de Bélgica, dos en el aeropuerto y otra en la estación de metro de esa ciudad.

Hasta el momento, se ha informado sobre 26 víctimas fatales y decenas de heridos producto de estos ataques, pero: ¿Por qué elegir a Bélgica como lugar de un atentado terrorista?.

Bélgica podía ser el centro de un ataque por grupos yihadistas al ser un aliado importante de Francia, por tener una de las “comunidades yihaidstas” más grandes de Europa y especialmente por liderar los operativos policiales en contra de los presuntos autores de los atentados a París en noviembre pasado.

El último viernes, la policía belga -en cooperación Francia- detuvieron a Salah Abdeslam, el principal sospechoso de planificar los atentados en París y considerado el líder de una célula terrorista en Bélgica.

Una captura que logró después de meses de trabajo y donde se desarrollaron diversas redadas a grupos yihadistas en Bélgica.

Aunque las autoridades han señalado que los ataques fueron provocados por terroristas, ningún grupo se ha adjudicado el hecho, pero se estima que podrían haber sido provocados por yihadistas.

Gran cantidad de yihadistas

Cuando ocurrieron los atentados en París, las miradas apuntaron directamente a Bélgica, por la gran cantidad de yihadistas que hay en ese país, incluso se considera que desde ese país han salido la mayoría de los militantes europeos de ISIS que combaten en Siria.

El experto belga en yihadismo, Pieter Van Ostaeyen, señaló en su momento “Bélgica es uno de los países de Europa del que, en porcentaje, parten más yihadistas a Siria e Irak”, en declaraciones publicadas por El País.

Incluso, otra reportaje de El País indica que todos los ataques registrados en Europa desde el 11-M en Madrid, han tenido alguna conexión con Bélgica, desde la organización hasta el origen de los implicados.

La misma nota explica que desde 2004 Bélgica es uno de los países con mayores detenciones y sentencias por yihadismo.