Durante la tarde del sábado se activó la alarma de la Central del Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas, por una vivienda de un nivel, ubicada en el kilómetro 13 de la Ruta 9 Norte, que estaba siendo consumida por las llamas, las que se propagaron al pastizal que se encontraba aledaño.

Hasta el lugar llegaron dos unidades de la Tercera y Quinta Compañía, cuyos voluntarios se abocaron en un inicio en evitar que el fuego se propagara a más terreno, logrando contener la emergencia, para luego proceder a dar control al siniestro que ya había reducido a cenizas la vivienda.

El ocupante de la vivienda, José Cárdenas Cárdenas, ya había sufrido un siniestro en noviembre de 2015 perdiendo la totalidad de dicho inmueble, consiguiéndose a través del municipio una nueva edificación para el terreno donde reside, en el cual cumple funciones de cuidador. Esta vez, una estufa habría sido el origen de las llamas, que por segunda vez le arrebataron su hogar.

En un inicio, los vecinos temían que el hombre pueda haber estado al interior de la vivienda, ya que tiene problemas de alcoholismo, lo que quedó descartado cuando lo vieron aparecer en el lugar.

La emergencia fue controlada cerca de las 19.00 horas. Cabe hacer presente que la falta de grifos y el mal estado del camino causó problemas para que bomberos realizara un trabajo óptimo.