Un complejo escenario en el Senado esperaría al proyecto de ley que despenaliza el aborto en 3 causales. La iniciativa despachada ayer por la Cámara de Diputados, deberá enfrentar las comisiones de Salud y luego Constitución en su segundo trámite.

El panorama es difícil, ya que ambas instancias son presididas por militantes de la DC (Carolina Goic y Pedro Araya, respectivamente), cuyos aliados estables en la bancada de senadores se desarticulan a la hora de hablar de aborto, cambiando el lado “progresista” en el que se han instalado en la Nueva Mayoría.

Ignacio Walker, por ejemplo, es un emblemático de la DC “dura” y en materia laboral, ha mantenido diferencias con el eje PS-PC, según consigna el diario La Tercera.

Sin embargo, en cuanto al aborto, su postura presenta mayor divergencia con las demás bancadas del oficialismo, no como el independiente cercano a la DC, Pedro Araya, quien si bien no ha entregado su posición sobre cada causal, dijo que duda respecto a las de inviabilidad del feto y violación.

Por su parte, Walker, ha manifestado su postura favorable al proyecto de interrupción del embarazo, aunque ayer, cuando la Cámara de Diputados despachó la iniciativa, fue enfático al indicar que su voto “lo decidiré en el momento de sufragar, porque quiero escuchar hasta el último argumento, con ánimo de persuadir y ser persuadido”.

Jorge Pizarro y Manuel Antonio Matta se suman a la tendencia inclinada hacia la nueva legislación.

Dudas y aprensiones

En la oposición al proyecto se encuentra el legislador Patricio Walker, contrario a las causales de inviabilidad del feto y violación; y Andrés Zaldívar, que apoya la iniciativa solo en caso de que la vida de la madre esté en riesgo.

Carolina Goic presidirá la Comisión de Salud que revisará el proyecto y ha mostrado cautela a la hora de detallar su postura, aunque presenta su recelo en la causa de violación y al igual que varios militantes de su partido, fue partícipe de impulsar el programa de acompañamiento.

De hecho, el proyecto recibió apoyo de la DC con la indicación de este sistema, ya que como estaba, fue criticado por su “ambigüedad” y permitir un “aborto libre”.

Bajo este escenario, las aprensiones y dudas las tiene más del 50% de los miembros de la bancada de la DC en el Senado, otorgando menos garantías al Gobierno que la misma colectividad entregó en la Cámara Baja.

Tras pasar las comisiones de Salud y Constitución, en la sala del Senado el proyecto tendrá que obtener 20 votos para ser aprobado.