El consejero regional de Renovación Nacional, Gabriel Torres, solicitó a la Contraloría investigar la entrega de 24 becas obtenidas a través del Sence, donde se impartió cursos de conducción Licencia A-3 profesional, y que fueron entregados por una escuela que no tenía certificación.

24 son los afectados que recibieron un curso de conducción profesional A-3 con simulador en la Escuela de Conductores Casyc, que no contaba con acreditación del Ministerio de Transportes.

El candidato a alcalde de RN por Hualpén Gabriel Torres, quien solicitó esta investigación, responsabilizó tanto al Sence, como a la Municipalidad de entregar este tipo de cursos sin certificación, pagando cerca de 600 mil pesos por persona a la empresa.

Carlos Parra, uno de los afectados, señaló estar muy molesto por la “poca seriedad” de las entidades responsables frente a este tipo de cursos, ya que confiaron en que era una capacitación legítima.

Mientras tanto, el seremi de Transportes César Arriagada confirmó que esta Escuela de Conductores no está autorizada para impartir cursos profesionales A-3 con simulador.

Desde la Municipalidad de Hualpén se desligaron del tema, ya que aseguraron que no es su trabajo “verificar” la legitimidad de los cursos, pues son solo “un puente” para difundir las capacitaciones aprobadas por el Sence, así lo aseguró Sonia Basso, encargada de la Oficina Municipal de Información Laboral.

Sin embargo, y pese a que el denunciante afirmó que lo más grave era que se invertían dineros fiscales para pagar estos cursos; Daniel Jana, director regional del Sence descartó esta información, asegurando que en este caso no existe inversión pública.

La Escuela de Conductores CASYC es propiedad del militante socialista Oclides Anriquez, mismo partido al que pertenece el Director del Sence Daniel Jana, quien descartó que existiera algún nexo entre ellos y afirmó que el servicio que dirige no tuvo injerencia en el proceso administrativo que eligió a la empresa.