Un grupo de manifestantes realizaron rayados en casetas y paredes de la estación Grecia en la Línea 4 del Metro, en protesta por el alza de los pasajes en hora punta. Desde la empresa avaluaron los daños en más de $1 millón y medio, anunciando que tomarán acciones legales contra los responsables.
Fueron entre 15 y 20 personas las que durante la mañana realizaron daños a la infraestructura de la estación, afectando con rayados hechos con pintura en spray tanto las ventanas de las casetas de pago como las paredes y una obra de arte instalada en el lugar.
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El hecho se generó a eso de las 7.20 cuando un grupo de desconocidos ingresó a las dependencias para manifestarse realizando una evasión por el costo del pasaje del Metro, momento en que lanzaron panfletos y comenzaron a realizar los rayados.
Uno de los testigos que estaba en el lugar describió que mientras esto ocurría, instaban a los usuarios a saltar los torniquetes y así evitar el pago del pasaje.
Según las personas que a esa hora estaban en la estación, el actuar de los desconocidos fue rápido, generando la molestia de los usuarios que estaban transitando por los andenes.
La obra de arte que resultó rayada con la pintura es una réplica de friso del partenón griego, lo que se transformaría en el primer hecho de este tipo que afecta de esta forma a una estación del Metro, ya que en otras oportunidades los vagones habían sido el objetivo de desconocidos que también los pintaron.
El capitán de Carabineros de la 43° Comisaría de Peñalolen, Marcelo Valenzuela, entregó algunos detalles de lo ocurrido y dijo cómo el grupo logró escapar del personal policial que acudió al lugar.
La gerente de asuntos corporativos y sostenibilidad de Metro, Maria Irene Soto, informó que el avalúo de los daños causados supera los $1 millón y medio y que iniciarán acciones legales contra los responsables de este hecho.
Desde la empresa Metro de Santiago, anunciaron además que ya se ha aumentado en un 18% el personal de seguridad en las estaciones, a lo que se suma una mayor presencia de Carabineros para resguardar la tranquilidad de los usuarios del tren subterráneo capitalino.
