La violencia en el fútbol parece ser un tema de no acabar. Muy por el contrario, la situación ha llegado a niveles impensados en el deporte de mayor convocatoria a nivel mundial. Los hechos ocurrieron durante un partido disputado este domingo entre el Femenino Cáceres y el Naranjo, en un encuentro válido por el grupo IV de la segunda categoría del fútbol femenino en España.

Las consecuencias fueron tales, que dos de las jugadoras del Femenino Cáceres debieron acudir al hospital luego de los fuertes dolores que le provocaron los golpes recibidos por parte de los aficionados rivales. Según informa el periódico extremadura; “una de ellas permanecía en cama 24 horas después de lo sucedido, aunque ninguna corre peligro“.

Leoncia Gómez Galán I Twitter

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Las futbolistas agredidas son Nerea y Selene, de 21 y 23 años. La mayor, a raíz de su gravedad, tuvo que realizarse una ecografía al día siguiente debido a los golpes recibidos en el cuello. Nerea en tanto, declaró a los medios su asombro por lo que vivió en aquél momento.

“Estaba impresionada. ¿Me están pegando?, me decía a mí misma con las manos en la cabeza. Me arrojaron al suelo. Solo sé que estaba rodeada de seis o siete futbolistas de El Naranjo. Una compañera del equipo se tiró encima para protegerme y ya me llevaron para el vestuario“, declaró al citado medio.

Leoncia Gómez Galán I Twitter

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El club de Extremadura decidió tomar cartas en el asunto y tras obtener la identificación de una de las agresoras, que sería madre de una de las jugadoras del Naranjo, enviará un informe a la Real Federación Española de Fútbol.

En el informe del árbitro del partido se señala que hubo: “una invasión de campo y la expulsión de cuatro jugadoras, dos de cada equipo“, según apunta el medio. Según exponen las deportistas, la gresca tuvo como protagonista a unas 40 personas que ingresaron al campo luego de finalizado el partido.