“Siento que la deuda no se ha saldado, la justicia actuó demasiado tarde”, indicó la presidenta nacional de la Unión de Ex Presos Políticos (Unexpp), Nelly Cárcamo, tras tomar conocimiento de la muerte de Sergio Arellano Stark, cabecilla de la “Caravana de la Muerte”.
En conversación con Radio Bío Bío, dijo que el retraso que hubo para que la justicia actuara vino a permitir que Arellano Stark sólo permaneciera un tiempo reducido privado de libertad. Sin embargo, comparado con otros casos donde criminales ni siquiera han sido formalizados, surge en parte la conformidad que él pagó parte de su deuda al recibir una condena.
Consultada si a su juicio la justicia estaría “actuando” -en atención que los ex militares condenados han recibido sentencias con una avanzada edad o con un importante deterioro de salud-, Cárcamo señaló que considerando que los hechos por los que se le acusan transcurrieron hace más de 30 años, no puede tildarse precisamente como una reacción oportuna por parte de la justicia.
En esa misma línea apuntó a que también es preocupante el ver que recién ahora se analiza presentar una normativa legal que prohíba la destrucción de documentos, cuando información vital que pudo servir para aclarar decenas de casos ya están eliminados o a resguardo bajo “7 llaves”.
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Aunque se promulgue en un breve plazo dicha normativa legal, añadió, la misma tampoco serviría para recopilar datos de hace mínimo 26 años atrás, por lo tanto da la impresión que se está trabajando para que el común de la sociedad no diga que no se hace nada, puntualizó.
Mencionar que Arellano Stark tras ser condenado por el Tribunal Supremo, fue sobreseído luego que se comprobara una serie de patologías mentales generadas por su avanzada edad.
