La Seremi del Medio Ambiente confirmó que sólo luego de un riguroso estudio, que se extenderá por un año, se podrá determinar el real daño ocasionado al Río Blanco por el vertimiento de concentrado de cobre, ocurrido el pasado 25 de febrero en el sector Saladillo, responsabilidad de Codelco Andina.

Tania Bertoglio, seremi de Medio Ambiente, explicó que este estudio -efectuado por expertos del Centro de Ciencias Ambientales EULA- es estacional y busca determinar el daño causado a los ecosistemas, como la biota del cuerpo de agua, y sólo tras ello se tendrá certeza de la cantidad de material vertido.

La autoridad informó que de manera paralela se está llevando a cabo, a través de la Superintendencia del Medio Ambiente, un estudio toxicológico de los sedimentos y de la calidad del agua.

Bertoglio confirmó que esos antecedentes podrían estar a disposición la próxima semana, tras lo cual se adoptarán las medidas que correspondan.

La seremi de Salud, María Graciela Astudillo, reiteró que para tranquilidad de la población el agua potable está certificada, y descartó que exista contaminación presente en ella.

Sin embargo, queda determinar si el Agua Potable Rural y aquella destinada a riego están libres de elementos contaminantes, lo que deberá ser definido en el informe toxicológico que están realizando en la zona.