Por un poco más de una hora, la ministra del Trabajo, Ximena Rincón y el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, estuvieron reunidos buscando consensos para priorizar la discusión de la reforma laboral que, según los plazos del oficialismo, debe estar despachada en marzo.

Rauda al salir y sin detenerse en ningún momento, Ximena Rincón, enfatizó en que la conversación se basó en el desempeño de su cartera, y las expectativas que se mantienen para este 2016.

Sin embargo, estas declaraciones estuvieron marcadas por el dicho “cuando tengamos algo que decir, se los vamos a comunicar“.

Desde la Central Unitaria de Trabajadores la queja por los retrasos en la reforma laboral se convertirán en una movilización para el 22 de marzo. El vicepresidente de la entidad, Nolberto Díaz, apuntó a que ya la reforma laboral lleva años en discusión.

La discusión –en segundo trámite legislativo– debiese ser retomada los primeros días de marzo de 2016.