Dos palestinos fueron abatidos a tiros el viernes, tras haber atacado a miembros de las fuerzas de seguridad israelíes, uno en Cisjordania ocupada y otro en Jerusalén, indicaron la policía y el ejército del Estado de Israel.

Por otra parte, el número de palestinos detenidos sin inculpación ni juicio ha aumentado considerablemente en los últimos meses, tras los numerosos arrestos que han realizado las fuerzas israelíes desde que se inició la nueva ola de violencia, el pasado 1 de octubre, afirmó, también este viernes, el Club de Presos palestinos.

La policía israelí dijo haber abatido en la mañana del viernes a un palestino que había atacado por la espalda con arma blanca a dos policías cerca de la Ciudad Vieja de Jerusalén.

Ambos policías, de unos veinte años de edad, resultaron levemente heridos, según los socorristas, que también informaron que una mujer también resultó herida, al recibir disparos aparentemente destinados al agresor. Este último tenía 20 años y era originario de Jerusalén Oriental, la parte ocupada y anexada por Israel.

El ataque tuvo lugar en la Puerta de Damasco, principal acceso a la Ciudad Vieja del lado de Jerusalén Oriental.

En la Puerta de Damasco, donde están desplegadas masivamente las fuerzas de seguridad del Estado de Israel, ocurren a menudo ataques antiisraelíes.

Posteriormente, en la tarde del viernes, otro joven palestino intentó atropellar con su vehículo a soldados israelíes cerca de Ramala, en Cisjordania ocupada, informó el ejército israelí.

“Un asaltante intentó atropellar a soldados con su vehículo durante violentos enfrentamientos en Silwad, al noreste de Ramala. Los soldados replicaron ante esta amenaza inmediata y abrieron fuego en dirección del asaltante, provocando su muerte”, indicó el ejército en un comunicado.

La mayoría de los 174 palestinos fallecidos en la ola de violencia iniciada el 1 de octubre en Cisjordania, Israel y Jerusalén fueron abatidos al atacar o tratar de atacar a fuerzas israelíes. Han muerto además 27 israelíes, un estadounidense, un sudanés y un eritreo.

Los ataques de este viernes tuvieron lugar al día siguiente de una nueva agresión en una zona comercial israelí de Cisjordania, donde dos adolescentes palestinos mataron a un soldado israelí de civil e hirieron a otro. Los dos agresores fueron detenidos.

En este contexto, el principal grupo que representa a los presos palestinos anunció que el Estado de Israel mantiene en la cárcel en detención administrativa a más de 700 palestinos.

Este régimen extrajudicial, que permite mantener en detención a una persona sin inculpación ni juicio por periodos de seis meses renovables ha sido condenado por las organizaciones de defensa de los derechos humanos.

El periodista palestino, Mohamed al Qiq, está en huelga de hambre desde el 25 de octubre para obtener el fin de su detención administrativa.

Según la Cruz Roja y los médicos, el periodista, de 33 años, que trabajaba como corresponsal de la televisión saudí Almajd TV Network, se encuentra en peligro de muerte.

A principios de este mes, el Tribunal Supremo de Israel suspendió la orden de detención administrativa, debido al estado de salud del periodista. Sus familiares pueden visitarlo, pero él no tiene derecho a salir del hospital de Afula, en el norte de Israel.