La tarjeta SIM será en un par de años una reliquia de la tecnología móvil, luego que en 2015 varias operadoras suscribieran un acuerdo en la Mobile World Congress (MWC) de trabajar en una SIM integrada en los equipos, denominada eSIM.
Este avance sin embargo no se verá por completo hasta 2018, cuando se estima esté de manera masiva en los equipos luego de un largo trabajo de testeo entre las operadoras y fabricantes móviles.
Según informó el diario español El País, recién en la MWC de este año se dará el inicio oficial a los trabajos de la eSIM virtual, con especificaciones técnicas, estándar y seguridad. Durante los próximos mees se verán algunos ejemplos, para en 2017 ver equipos en mano, trabajando.
De esta forma, no será hasta 2018 cuando se estima esté masificada la eSIM, que no sólo se equipará en teléfonos, sino también en weareables como relojes, e inclusive automóviles.
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Las ventajas
Las ventajas que supone la eSIM virtual son varias, tanto para las operadoras, que dejarán de repartir estos chip a todos sus usuarios, como a los clientes quienes podrán cambiarse automáticamente de compañía.
El ideal es que el traspaso de una empresa a otra sea más rápida, sirviendo además para cambiarse a otra operadora en otro país, lo que haría desaparecer el carísimo roaming.
Según explica el medio español, la eSIM permite crear un “perfil de interoperabilidad” que es que un operador pueda crear un perfil de usuario, el que “puede ser descargado en cualquier eSIM compatible, independientemente del fabricante del terminal o dispositivo”.
Así entonces, la SIM desaparecerá, pero calma que aún queda mucho por hacer.
